No todo son gadgets en el CES de Las Vegas.
También hay coches, muchos. Y conceptos futuristas como este cargados
de tecnología. Se trata del F 015, la idea de coche autónomo y de lujo
del futuro de Mercedes. Parece que esté a punto de despegar pero no, los
automóviles que vienen aún llevarán ruedas.
El F 015
cuenta con paneles LED en su exterior, tanto en el frente como en la
parte trasera, que comunican si el coche está en modo autónomo,
conducido por sí mismo, o si hay un conductor al volante. Si los LED
están encendidos y de color azul, el coche conduce solo. Si están de
color blanco, hay una persona a los mandos.
El
coche está fabricado en una combinación de aluminio, acero de alta
resistencia y plástico reforzado de fibra de carbono, lo que lo hace un
40% más ligero que los actuales Mercedes de Clase S. El motor es híbrido
de hidrógeno y eléctrico, pero lo suficientemente potente para saltar
de 0 a 100 km/h en seis segundos y medio, hasta alcanzar una velocidad
máxima de 120 km/h. Su autonomía es de casi 200 kilómetros solo mediante
el motor eléctrico.
El
interior del coche está diseñado como buen vehículo autónomo, con
asientos giratorios para crear un espacio central amplio, un "digital
arena", que lo llama Mercedes. Como buen coche de lujo, cuenta con todo
tipo de detalles como pequeñas mesas, pantallas laterales y acabados en
maderas nobles. Un proyector puede mostrar todo tipo de imágenes
relajantes en las pantallas, para hacer el viaje más placentero. Los
asientos se giran automáticamente al abrirse a las puertas, para evitar
sufrimientos a nuestra espalda.
El F
015 funciona también integrado con la nube. La idea: si quieres
planificar el viaje del día siguiente, lo puedes hacer la noche anterior
desde tu ordenador, subirlo a la nube y el coche lo ejecutará sin
rechistar al día siguiente. ¿Quieres ajustar la temperatura del coche
una par de horas antes de entrar para que esté bien climatizado? Lo
podrás hacer desde el móvil. Futurista y conectado.
¿Cuándo lo
veremos? Tal cual probablemente nunca, pero un concepto muy similar
debería estar en funcionamiento, según Mercedes, en 2030. Año arriba,
año abajo.
Esta mayor altura beneficiaría también a la hora de instalar una mesa desplegable, ya que unos asientos con un diseño más vertical, más en la línea de una silla que de un sofá, ocuparían un menor área que los modernos asientos reclinados presentes en el diseño de Mercedes, permitiendo así la presencia de una mesa de mayor dimensiones en el mismo espacio. A mi modo de ver, la presencia de una mesa y de unos asientos delanteros pivotantes es clave a la hora de diseñar un interior para un vehículo autónomo.
La mayor altura del coche daría lugar también a unos paneles de mayor superficie para las puertas, lo que provocaría un mejor resultado al utilizarlos como pantalla de la manera que presenta Mercedes.
Finalmente decir que tampoco el diseño exterior del diseño de Mercedes me resulta muy atractivo, como suele ocurrir con la mayoría de diseños conceptuales, así que no veo por qué no se podría acercar más a un "Papa-móvil". Tal vez el diseño aerodinámico del modelo que propongo, y su belleza, no sean gran cosa, pero imaginando una situación donde los vehículos ya no sean manejados por personas, sino que sean autónomos, fluyendo de manera armoniosa y segura, no veo qué necesidad habría de diseñar modelos de bajo coeficiente aerodinámico que aceleraran de 0 a 100 km/h en 6 segundos, o que circularan a elevadas velocidades, ya que no tendrían cabida en un tráfico automatizado.
Entiendo que se trata de un concept car, pero aún
así no estoy del todo de acuerdo con el enfoque que le ha dado Mercedes.
Entiendo que la gracia de un coche autónomo está en poder hacer las
cosas que uno haría en un avión, un autobús, un tren o incluso su propia
oficina, al estar liberado de la tarea de conducir el vehículo.
Pues si esto es así, opino que el habitáculo debería estar mucho
mejor adaptado a las necesidades de las personas. Partiendo de la base
de que el aspecto exterior debería estar supeditado a la utilidad del
coche, veo mejor un modelo con un techo más alto, donde los asientos
puedas ser también más elevados, de manera que el usuario pueda tener
una postura más natural a la hora de reclinarse en el asiento para
utilizar una mesa, tal y como sucede en un tren, por ejemplo.Esta mayor altura beneficiaría también a la hora de instalar una mesa desplegable, ya que unos asientos con un diseño más vertical, más en la línea de una silla que de un sofá, ocuparían un menor área que los modernos asientos reclinados presentes en el diseño de Mercedes, permitiendo así la presencia de una mesa de mayor dimensiones en el mismo espacio. A mi modo de ver, la presencia de una mesa y de unos asientos delanteros pivotantes es clave a la hora de diseñar un interior para un vehículo autónomo.
La mayor altura del coche daría lugar también a unos paneles de mayor superficie para las puertas, lo que provocaría un mejor resultado al utilizarlos como pantalla de la manera que presenta Mercedes.
Finalmente decir que tampoco el diseño exterior del diseño de Mercedes me resulta muy atractivo, como suele ocurrir con la mayoría de diseños conceptuales, así que no veo por qué no se podría acercar más a un "Papa-móvil". Tal vez el diseño aerodinámico del modelo que propongo, y su belleza, no sean gran cosa, pero imaginando una situación donde los vehículos ya no sean manejados por personas, sino que sean autónomos, fluyendo de manera armoniosa y segura, no veo qué necesidad habría de diseñar modelos de bajo coeficiente aerodinámico que aceleraran de 0 a 100 km/h en 6 segundos, o que circularan a elevadas velocidades, ya que no tendrían cabida en un tráfico automatizado.
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